Cuanta conexión hemos perdido!, solamente por desviar la mirada a otro foco de atención. Cuánta falta de deseo existe hoy entre las parejas. Cuánto propósito hemos desviado en el sexo. Hoy quiero dejarte dos claves importantes para poder despertar el deseo, la conexión y complicidad lúdica con tu pareja. Cuándo el propósito es que llegue el bebé nos alejamos de la esencia pura del acto sexual y rompemos el vinculo sano y perfecto entre nosotros y nuestra pareja. Recordemos que un sexo amoroso y consciente, estimula la fertilidad.
Dos claves sencillas, pero tan poderosas que debes probar.
En mis clases de la universidad, hubo una frase que me marcó para siempre, porque es la clave de la buena comunicación: mirarse es un acto simple pero primordial para que se establezca el contacto entre un emisor y un receptor. Clarito como el agua. Y si llevamos esto a la comunicación (también sexual) con la pareja, que podemos decir?
¿Cuánta dedicación regalas a tu pareja simplemente por darle tu mirada atenta, recibiendo a través de tus ojos, pero sintiendo con todo tu cuerpo lo que el te está entregando?.
Los ojos
Los ojos son la puerta de entrada del mundo a nuestro cuerpo.
Para volver a encontrar la conexión energética entre una pareja, debemos dejar que el otro nos penetre energética y emocionalmente: primero por nuestros ojos. En este acto dejamos que empiece a trazarse un lazo de complicidad que puede llevar a #despertarlafertilidad. Le damos permiso para para que entre y participe de una nueva creación, primero por los ojos. Pero…
¿Cuántas veces hacemos el amor con la luz apagada y/o con los ojos cerrados?
Quiero invitarte a que pruebes, que sucede en tí, cuando te conectas intencionalmente con una mirada, a tu pareja. Percibe que siente tu cuerpo, que te comunica. Y date cuenta que muchas veces es sólo una mirada que despierta el deseo.
Y porque te estoy diciendo esto, porque sé que cuando estamos persiguiendo el sueño de un bebé, dejamos de mirarnos por amor/deseo/instinto y nos miramos con intención/propósito/control, ¿me sigues?. Pero es importante que primero exista la pareja para que luego el bebé se decida a llegar.
Te invito a que acuerdes con tu pareja, mirarse más a los ojos, sin agresividad ni control, sino con amor y receptividad a lo que me quiere dar el otro. Hazlo también cuando tengan sexo: verás que en ese momento, mirar a los ojos, será muy distinto.
La respiración
Explora sobre el cómo es tu respiración cuando estas nerviosa, cuando estas conversando con tu pareja, cuando estas sola, cuando estas deseosa.
Respirar con intención, nos transporta al presente, acalla el mundo mental, nos puede aportar sensualidad, mucha sensibilidad y conecta con la esencia de nuestra energía vital.
La respiración natural (circular y efectiva) es realmente un masaje en la pelvis que activa nuestros motivación y centros sexuales. Despejando y despertando todo el eje central de nuestro cuerpo: garganta, corazón, plexo solar, vientre y genitales, convirtiendo nuestro útero en un gran cuenco receptivo.
Cualquiera que sea el grado de conciencia que aportes a la respiración antes de hacer el amor, supondrá un incremento en el contacto con tu pareja y calidad del encuentro sexual.
Un ejercicio muy útil: previo a recibir a tu pareja (llegue a casa por ejemplo), dedícate a estar acostada, tranquila por unos 5 a 10 minutos, solamente respirando y sintiendo como tu cuerpo reacciona. De seguro tendrás una mejor disposición en todo sentido, al momento del encuentro.
Cuando yo me hice consciente de estas dos claves, dije «naaaah que fácil, respirar y abrir los ojos, eso lo hago siempre» y no! no es tan fácil cuando le pones una amorosa intención.
Espero que te hayan gustado estas dos claves, has tu la prueba!. En teoría suena fácil y sencillo… ya verás en la práctica!.
Con Cariño
Dany.
**Este post fue inspirado en el citas colsubsidio famisanar por internet.